disfrutando el silencio [Libre]

No suele haber mucha gente en la sala común de la cabaña principal, digamos que no a mucha gente le gusta. Algo a mi favor. Quería estar sola, pensar soe cosas que habían sucedido. Suspiré y me dejé caer en unos de los sillones mientras cerraba los ojos y clavaba mis uñas en una de mis muñecas.

Odiaba este lugar, no..La gente en el. Decidi dar una vuelta por la gran casa o como sea que se llame, fui a la sala común, tengo entendido que siempre está vacía. Era alfo que me gustaba, debo admitirlo. Para mi sorpresa no esataba solitaria, no me molestaba, de hecho. Vi a Rachel y me acerqué a ella. "Preciosa"- le dedique una sonrisa sentándome a su lado.

Sonreí al reconocer la voz que me trajo a la realidad. Abrí lentamente los ojos y lo miré. Cómo estás? - Me acomodé en el asiento para poder verlo mejor, raro que él esté acá.

Me encogí de hombros con una actitud despreocupada. -"Bien. Tu?"- La mire -"Que hacias aca solita?"- Sonrei.

Reí por el término utilizado. Supongo que vine a pensar sin que nada se interponga entre mi objetivo y yo - Negué y lo miré. Vos, a qué viniste?

"A pasar un rato yaciendo nada, supongo" Frunci los labios. -"Pensar? Bien"- rei suavemente.

Me encogí de hombros. Hay cosas que uno nunca puede dejar de pensar.. - No se porque, pero con él me sentía bien. Era con la única persona con la que me demostraba realmente como era.

-"Lo se"- Hice una mueca -"Como si te persiguieran"- Rei de modo irónico -"Pero..tienes que distraerte..para asi pensar en otra cosa, es simple"- suspire

Cuando es algo de lo que dependes, es imposible.. - Ultimamente me acordaba demasiado tiempo de mamá y del accidente..

-"No lo es. Creeme."- me entrente a ella. -"No tienes cara de ser tan pesimista"- sonrei de oreja a oreja.

Creo que el otro día descubriste que no soy como me muestro - sonreí levemente y sujeté sus dedos. Me sentía cómoda jugando con ellos.

Entrecerré los ojos asintiendo -"Es correcto"- arquee las cejas.

Asentí y seguí jugando con sus dedos.

La miré fijamente, no se que me pasa con esta caraja, pero algo raro es.

Levante la mirada y me encontré con sus ojos. Sonreí algo tímida y acaricié sus dedos.

Se veia tan jodidamente bien cuando sonreìa de ese modo. Vi sus labios y fruncí los míos.

Pellizqué las yemas de sus dedos y me paré. Pero, pensemos en cosas lindas. Te desafío jugar al pool - Sonreí viendo la mesa de juego y luego a él.

-"Con sideras el pool algo'Lindo'"? Rei. Que frita. -"Por su puesto"- la mire.

No, pero por lo menos es divertido - Sonreí y busqué un palo y el triangulo para colocar las bolas.

-"En eso tienes razón. "- Me puse de pie y la seguì

Reí y acomodé las bolas en el triángulo, ubicandolas en uno de los lados de la mesa. Busqué la bola blanca y la coloqué en su punto y tomé el cubo de tiza para la punta de mi palo. quién rompe?

-"Tu"- le dediqué una sonrisa y me coloqué frente a ella.


(Yo! No te puedo hablar sietsas offline xd)

Que caballeroso - Reí y me posicioné, inclinandome sobre la mesa para poder calcular mejor el golpe. Rompí la formación, pero ninguna bola entró.

No pude evitar hecharle un vistazo a su trasero. Al ver su jugada, sonrei de un modo arrogante. -"Te dije que tengo una mesa de pool en casa?"- Rei y jugué haciendo que una entrara.

Fruncí el ceño. Entonces, creo que me merezo una ventaja, mínima aunque sea. - Sonreí y observé la mesa. Ninguna bola parecía entrar.